En noches frías de amor.
En momentos oscuros de soledad.
Allí desembarqué en tus pensamientos
para ver qué piensas de mí
sentir tu corazón latir
me hará sentirme viva.
Por el recuerdo de aquel amor sentido
allí, en el regazo de tus besos
en la sintonía de tu sonrisa
en el azul de tu cielo.
Entraré yo…
Porque iré donde el corazón me lleve…
A tu lecho mudo de amor.
A tu ventana cerrada de silencio.
A tus murallas de secretos.
A tus alas de amor y viento
que de mis labios se escapó un día…
Allí quiero sentir que tu corazón late por mí,
saber que vivo en ti,
me regresará la alegría de vivir.
Siento tus manos ansiosas
caminar por mi vientre helado
ansioso de saberte amado
y te quedas allí…
Quieto, mudo, ciego y sin sentido.
Por no saber entrar a mi pasado
por no coronar mis recuerdos muertos
por tener la angustia de no amamantar mis sentimientos
te fuiste con la pena de tus inviernos lentos.
Y me quedé temblando de amor por ti,
y hoy huérfana de ti, me acerco a tus sueños
Y estoy allí…
Hasta donde el corazón me lleve…
Alicia Pérez Hernández
(No es la pluma la que escribe)