Hoy en un sueño
algo se quebró,
pasó un caballo negro
que trajo dolor,
desperté casi de un salto
en plena madrugada
con un nudo atravesado
y una duda atragantada.
Los recuerdo tan perfecto,
a los caballos y a las aves,
a la angustia estrepitosa
y ese negro indomable,
me ha turbado la mañana
con sospechas de lo incierto
y aunque yo no sé que pasa
sé que es malo y lo presiento.