"Inspiración que vienes y vas,/ amiga que me acompaña casi desde que nací,/ siempre tengo una frase para los demás/ y ya ves... hoy no tengo una para mí".
Estoy haciendo a mi modo historia,
para quedar en un lugar de la memoria
de quien se toma su tiempo y me lee,
no sé si como poeta o pobre diablo
ni sé tampoco si cuando escribo o hablo,
lo que expreso alguien me lo cree.
Hago historia con lo que escribo
porque es testimonio ahora que vivo
de lo que sueño dormido y despierto,
ése mismo es al fin y al cabo el reto,
que recuerden mis letras con respeto
cuando yo ya me haya muerto.
No sé si sea tiempo perdido
o si muy cursi quizá he sido
a la hora de escribir, de expresarme,
ni siquiera sé si esto me conviene...
pero le agradezco mucho al que tiene
un minuto de su tiempo para darme.
A todos nos gusta trascender,
que cada poema nos evite caer
en el olvido más injusto...
Cuando alguien que mi poema nombra,
se pregunta si es árbol que da sombra
o si es tan sólo un arbusto.
Hago historia al sentarme a escribir
describiendo lo que es mi sentir
y haciendo también que se identifiquen
buenos amigos, mujeres bellas
y que en su historia ellos y ellas
algún capítulo me dediquen.
Algún día dejaré de publicar
y aún no se me ocurre qué razón dar
para explicar que eso suceda...
Si escribir es mi pasión
tal vez diga que mis letras son
lo único vital que me queda.
Por ahora no se cansa mi mente,
voy haciendo historia diariamente
con inspiración que no sé de dónde llega.
Del amor que a todos nos aborda,
de la sociedad que a veces es sorda
y la justicia que en ocasiones es ciega.
Pasará el tiempo para que pueda decir
que con mis letras pude cumplir
con la misión de mostrarme más humano.
Ya habrá sido mucho lo que escribí,
pero si alguien se acuerda de mí
sabré entonces, que no fue en vano.