El éxito comienza cuando uno se da cuenta que a fracasado
y no llora postrado en él,
sino que lo usa como pedestal para dar un nuevo paso en el camino,
como impulso, pues ha aprendido...
y aprender no es solo tenerlo en pensamiento
sino volcarlo a la práctica...
Todo es potencia,
hasta que decides luchar
cual semilla que brota en pos de dar la cara al sol,
aceptando que los vientos, lluvias
y todas las condiciones por las que se pasa
no son para marchitarlo,
sino para fortalecer sus raíces, su esencia , su ser,
para ser más fuerte y dar frutos y dar sombra…
Que al fin y al cabo ese es el ciclo natural de la vida:
Aprender para enseñar...
Recibir para dar…
Todo lo recogido en la vida no es para llevarlo con nosotros ¡no!...
es para transmitirlo, es para reflejarlo…
y dejar pequeñas huellas
que nos permitan ver el manto estrellado
cuando se crea que ya todo se acabado…
Remlid