Ven entrégate conmigo, limpia tu cuerpo sin palabras
Déjame apoyar mi cabeza en tu nuca, tu cuello,
Buscar desde babor a estribor tu boca
Ven entrégate conmigo, sin susurros, sin luces
Solo bañados con el estío de nuestras edades,
Desnudos siguiendo solo el rastro de nuestras caricias
Ven entrégate conmigo, sin mirar paredes, sin espejos
Tocándonos con solo caricias y besos presuntuosos de tenerse
Enloquezcamos sin ventanas, sin años …
Tan solo escribir el libro no escrito