Una suave sonrisa de sus ojos
es anhelo en caricia perfilada,
de boca por deseo perfumada
rinde alma y corazón a sus antojos.
Una leve palabra en labios rojos
es delicia del alma enamorada,
que intuyendo dulzura azucarada
trepidante se agita sin sonrojos.
Insistentes deseos en manojos
alucina la mente fascinada,
frenética pasión desenfrenada
a cálculo y pudor corre cerrojos.
Relucen picardías en sus ojos,
destellan emociones desatadas,
caricias en figuras descolgadas,
lamiendo de la piel dulces antojos.
En sábanas de seda cuerpos flojos,
crepitan sensaciones desbordadas,
bullendo en ansiedades derramadas,
gemidos se aglutinan cual despojos.
Desnudos de pudor y sin sonrojos,
aromas y humedades entramadas.
Plegadas en pasión arden miradas,
danzando en fulgurantes cielos rojos.
Compilan sensaciones en manojos,
cabalgando sus formas acopladas.
Sonrisas resplandecen deslumbradas,
visiones incitantes a sus ojos.