con sus alas desplegadas
vuelan sin saber para donde
mamíferos de ropa enlutada
que entre sombras se esconden.
Dicen que es amigo
del Drácula chupa sangre
y que por ser un vampiro
tampoco lo quiere nadie.
Pero quien la verdad busca
para saber cómo eres
sabrá que son las frutas
las que comer tú prefieres.
Murciélago con qué extrañeza
evitas tú el desvelo,
poniendo hacia abajo tu cabeza,
es que concilias tu sueño.
Y aunque a muchos asombre
esta curiosa coincidencia
el Murciélago lleva en su nombre
las cinco vocales completas.
Alejandro J. Díaz Valero