Hola soy la Urraca
aca, aca, aca.
Un momento bandida
no seas tan atrevida
yo soy la Vaca
aca, aca, aca
así que ya sabe
evítese un problema grave.
Y la Urraca para no molestar
decidió su nombre cambiar.
Resolveré en forma sencilla,
Me llamaré Urraquilla
illa, illa, illa.
Un momento señora
no sea usurpadora
yo soy la Ardilla
illa, illa, illa
sea seria y no invente
busque otro nombre diferente.
Antes de que otro concurra
me haré llamar sólo Urra
urra, urra, urra.
Ahora si se complicó la cosa,
no sea tan graciosa
yo soy la Burra
urra, urra, urra
y la pobre Urraca del cuento
no encontraba nombre propio
pues siempre terminaba en lamentos
cada vez que encontraba un socio.
Esta misma situación
a muchos también les pasa
que son como las urracas
muy faltos de decisión
que solo bailan al son
de quien toca las maracas
y su vida la destacan
por cambiar identificación
empujados por el facilismo
y sin tener confianza en sí mismo
terminan en decepción.
AUTOR: Alejandro J. Diaz Valero
Derechos de Propiedad Intelectual Registrados
Bajo el Número 1304114932264
Maracaibo, Venezuela.