Ella en su cuarto
Los veía a todos pasar
Algunos vestían prendas negras
Sus hijos de blanco lloraban.
Mientras tanto recordaba
Aquellos instantes en que ese joven
Sin importarle su pequeña
Y sin mediar palabra
La trajo a este cuarto
Donde aprenderá a ver a sus hijos
Justo a los ojos
Sin que estos puedan besarla,
Desde esa caja de madera y vidrio.