Unido a todos mis amigos estoy
implorándote Señor por la salud
de una niña que cumple hoy
un día más en estado de ingratitud…
Como un coro de ángeles quiero
tocar y mover de Dios su corazón,
todos unidos forjando como hierro
una bella, sincera y querida oración.
Una oración que por más sea canción
susurrada en el alma de quien vela,
siempre detrás de aquella densa tela
donde la fe se hace una con la razón.
Estoy alzando mi plegaria por salvar
a un ángel que simboliza la alegría,
deseando a todos los corazones llegar
para que la fe crezca en los futuros días.
Aquí estoy haciendo grande mi petición,
llevando a mis ruegos hasta las alturas
con la más hermosa inspiración,
esperando que se conviertan en una cura.
Una cura de por si necesaria por todos,
puesto que no sólo un corazón se rompió,
sino nuestros corazones que lloran por otros,
siempre buscando eso que todo lo cambió.
Quisiera formar un árbol de palabras lindas
con hojas de cartas escritas de oraciones,
ésas que sólo regalamos a nuestras visiones,
y que hoy cedemos a una causa que brilla.
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Fecha 26-agosto-2012
Poema Fusionado de:
Oscar Castro y Heyler Hartley
(DonQuijoteExplorador y Chico de las poesiaz)