Yo no uso reloj porque mi tiempo eres tú
Te hare un poema en segunda persona, porque tu siempre serás la primera,
La primera gota de lluvia que humedece mis labios al decir adiós,
Adiós como hasta luego, porque como hasta nunca, solo Dios.
Sin embargo, cuando el viento soplaba a mi favor le susurraba al oído,
Que conmigo serias feliz, que te trajera conmigo
Si es de venir volando, que el tener alas sea una opción,
Que esa Blanca golondrina, nunca vuele de mi balcón.
La puerta siempre estuvo abierta, se posó en mi ventana porque nunca la vio,
Quería posarse en mi pecho, pero de mi techo nunca salió.
Es estrecho el vínculo entre mis pensamientos, entre mis sueños
Solo una "T" y una "U" los une a ellos por ser tan bellos.
El impune recuerdo de hoy tenerte conmigo,
En fríos de enero, solo él era mi abrigo.
Le corté las espinas a la rosa más hermosa de primavera
Quería que la tuvieras, pero mi golondrina no era paloma mensajera.
A cualquier precio quería que la vieras, personalmente yo era parte de ella
Con mi mano izquierda tome la flor, y con la derecha vacié espinas en mi libreta
Mi libreta de amor polvo tenía, tenía abierta desde hace rato
Aún sostenía la flor en mi mano, cuando supe que habías partido volando.