Inclinado sobre las escaleras del viejo campanario
Veo volar despreocupadamente las palomas,
Palomas que habitan y procrean sin recato,
En los techos casi derruidos del silencioso monasterio.
Se oyen los acompasados pero ágiles aleteos
Que producen al levantar el vuelo
Rompiendo el monótono silencio…
¡Felices¡ …….como saludando al cielo……
Abajo….se ve el movimiento rutinario del personal
Que afanoso cumple con su trabajo
Y caminando en círculos a veces,
Y en línea recta otras… ¡al caporal!
Mueve los brazos de un lado a otro,
Como haciéndose entender.
Sin gritos ni aspavientos
Se hace obedecer……….
Al fondo, luce hermoso el bien cuidado jardín,
Reflejo inequívoco del trabajo productor
Y proveedor de bellos sentimientos sin fin
Que lo hacen florecer……..
Y me quedo absorto…….reflexionando
¡Que inmensa es la riqueza que DIOS nos heredó ¡
Y que por avaricia unos….y por maldad otros……..
La estamos acabando……o ¡la estamos destruyendo!..-.
Por Alejandro de león soto
Tijuana, baja california, mexico
11 de Agosto 2012