Muero lentamente
En la fría cama de un hospital,
Mi movimiento
Cada vez más inerte
No responde ante esta muerte tan letal.
Mi pulso es más lento,
Siento que ya no me queda aliento
Mi pecho se me ensancha
Me falta la respiración
Lentamente mi vida se apaga,
Mi existencia llegó a su fin,
Pasa por mi mente
Una ráfaga de recuerdos sin fin.
Esta oscuridad me está matando,
Hay mucha tristeza en mí alrededor,
Siento a mi madre llorar,
A familiares y hermanos también,
Todo es un cuadro de dolor.
Estoy entrando en un túnel,
Veo a mucha gente entrando en él
Siento una paz increíble,
Se respira un amor tan sublime
Como es sublime
El amor de Dios.
Me guía una luz brillante,
Veo llegar flamante
La silueta de mi padre,
Quien me coge fuertemente
Y me transporta lentamente
A un mundo de amor y paz.
Mi alma regresa a este mundo,
Como triste vagabundo
Busco a mi madre sollozante,
La miro incesante
Y la cojo por un instante
Acariciando su bello rostro
Con ternura y dulzura,
Te suplico madre amada
Ya no llores por esta amargura.
Todo es felicidad allá
Mi alma ya descansa en paz
Mi cuerpo ya no sufre más,
Para de llorar
Ya no sufras más,
Porque siempre yo estaré
Y a tu lado yo me encontraré
Para amarte cada día más y más.
Mi alma se despide,
Se aleja cada vez más,
A lo lejos ya se pierde
Su silueta una vez más.
Adiós querida madre,
Siempre te amaré,
Y en el más allá
Yo te esperaré.