A ellos siempre
hubo que tomarles el pulso
se fueron poniendo viejos
antes de tiempo
cruzaron el umbral
dando saltos-
no les fue dado el derecho
a la espera
jugaron con descuido
precoces en las aulas
se amotinaron afuera
en las vidrieras
vaciaron las botellas
con asombro
quemaron todo el humo
fueron poco a poco
siendo los más dóciles
de este mundo
y a la vez
lo más ancianos por encargo.