Ha llegado a mi vida,
Después de una larga espera,
Una mujer que solo quiere que la quiera,
Y la que desde ahora es “mi querida”.
Alegrías me ha dado,
Después de una tormenta en mi ser,
Ha llegado sin querer
Y mis dolencias ha aliviado.
Acaso será aquella,
La que el destino prevista me la tenía,
La que después de la agonía
Vino para hacer mi vida bella.
Creo que ella es la esperada,
Pues nunca me había sentido así,
Nunca desde que sufrí
Por aquella, “mi niña”, “mi enamorada”.
Gracias doy al cielo,
Por esta alegría plena,
Por darme vida nueva,
Después del desconsuelo.
Mas una pena nace,
En esta mí dicha sin par,
De que me fuera a enamorar,
Y que de nuevo me suceda aquel impace.
Pero eso ya no me intimida,
Pues para eso yo he nacido,
Para amar sin sentido,
Y terminar muerto en vida.