Te he querido tanto…
con mi risa… con mi llanto…
con ese dolor que guardo
en lo profundo del corazón.
Tu amor lo llevo tan dentro
que se nutre del recuerdo,
Igual que la lira se nutre
con una bella canción.
Cada que quiero olvidarte,
me hace eco el pensamiento
como ola golpeando la roca…
me retumba el sentimiento.
Y una voz misteriosa
me pregunta por qué te quiero.
Yo no sé la respuesta…
¡Del por qué te quiero… como te quiero!
No sé si es bueno o es malo…
quererte como te quiero,
aunque una lluvia de olvido
me esté emparamando el alma
y una borrasca impetuosa
me envuelva en sus aguas negras.
¡Yo no sé por qué te quiero!
si ando cargando cadenas
y una camándula de lágrimas
que pesa igual a mis penas.
¡Yo no sé por qué te quiero!
Si ni siquiera brilla el lucero
y esa luna voluptuosa
que rielaba en el firmamento…
Hoy no es más que una sombra…
que me sigue, como un tormento.
Felina.