Si una pena te agita
y corrompe al corazón
piensa en soñar en bondades,
que los sueños bellos son.
Son el medio que tienes
para alimentar el alma,
y llenarla de sentimientos
al compas de una mirada.
De unas manos que te hablan
o de unos ojos lisonjeros
o unos labios susurrantes
que te cuentan bellos versos.
Son verdades melodiosas
que alegran a nuestro Yo,
y que arrojan a la tristeza
muy lejos del corazón.
Arely