Me voy, como si el viento sur me acompañara,
como si se retiraran de la playa las caracolas;
me voy despacio, no entiendo como, pero me alejo
llevando conmigo plenos recuerdos adormecidos
Y aquel poema que cargo aquí en este pecho,
abriendo paso, calando hondo, avivando
las largas letanías acompasadas.
El tempestuoso adiós ya se me escapa.
Con la luz de vuestras letras me voy nutrido,
con el signo de la vida lleno de dudas,
amando letras, soñando penas,
pero cargando todo un armónico eco lejano.
CARLOS A. BADARACCO
16/8/12
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