TE AMO A TI, A jESÚS, AL MUNDO
Cuánta alegría hoy existe en mi corazón.
Qué feliz me siento de estar aquí.
VIVO.Ya la idea en búsqueda de la
muerte, murió.
Hace un corto tiempo sí,
te buscaba muerte, quería encontrarte.
Pero hoy, no te quiero, huyo de tí.
Apártate, no me sigas...
ya no te quiero.
A tí, muerte, te estoy hablando.
Aléjate. No intentes encontrarme
para llevarme contigo.
Cometí el error de desearte,
de que vinieras a buscarme
para que de una vez,
se acabaran mis sufrimientos,
mis penas y desengaños
de la vida, del amor de la gente,
de todas las ausencias...
que ya nunca más volverán...
HOY soy feliz porque creo
en lo que antes no creía.
En el amor.En la presencia
de mi amada. La olvidada.
La que perdí, por esas cosas
de la vida.
Por mi intolerancia y por mi orgullo.
Un manotazo ya les he dado.
Acepto todo. Tolero todo.
Y en mi ser, existe hoy,
la humildad. La Fe perdida,
hoy rescatada.
Si tienes a alguien a tu lado,
amig@,cuídal@.
Consérval@. No te quedes sol@
en la vida.
VIVE, y ama.
Eso es lo que hoy siento: AMOR.
Por tí, mi amada,
por tí amig@.
No quiero perderl@s.
Quédate siempre conmigo, amor.
Sí, soy feliz porque he comprendido
de qué vale tener rencores
y desamor, cuando antes existió
el amor. Quiero permanecer
amando. Por mí. Por tí.
Amar para VIVIR.
Amar para estar sano de espíritu.
Sano de mente. Sano del alma.
Aunque muchas veces
explotada la tuve, desgarrada.
Hoy, ya no es así.
Hoy quiero gritar que mi felicidad
es tan inmensa, que me asombro
yo mismo de ello.
Algun@s no me permitieron serlo.
Pero todo lo malo olvidado está.
El estar enamorado de la VIDA,
me lleva a olvidar lo mal vivido.
Grito mi amor por tí,
mi amada.
Ya la muerte no es necesaria.
¡Fuera muerte!
No te deseo más.
Cuando Él lo decida,
ven a buscarme.
No antes, porque te rechazaría...
si Ël no lo dispone.
Él, mi Señor de los cielos.
Mi Cristo eterno.
Mi Amo de la vida.
¡Cuánto amor siento hoy
por el mundo!
Por el mundo todo.
Amar y ser amado por ella,
y por tí Señor, Rey de Reyes.
Ahora, en este mismo momento,
abrazo con mi pensamiento a ella
y a tí, mi Cristo crucificado.
Tú, que aceptaste la muerte
por nosotros...
Tú, que me has hecho comprender
a través de tus palabras,
que hay que saber perdonar...
y ser perdonado.
Canto mi perdón a los que he ofendido.
Canto mi amor a tí, mujer que me
ayudaste junto a Jesús, renunciar
a la muerte, y aceptar la vida.
Basta de angustias.
GOBIERNO, dennos paz.
Sean humanos.
Cada uno de ustedes hagan
de cuenta que somos hijos suyos.
Pónganse en la piel del Señor...
nosotros, todos los seres del Planeta
somos sus hijos...
y debemos respetar y AMAR.
¡Grito mi felicidad!
¡ AMO al mundo todo!
Todos los derechos reservados del autor(Hugo Emilio Ocanto-17/08/2012)