gaston campano

Femicidio

La noche como viajera

me ha traído de regalo

un sueño nunca soñado.

Abriéndose una flor

en hermosos colores

viéndose como nube

rojas en sus albores.

La entrega en esta tierra

para sus frutos de vida.

La encontramos con fuerza

entregándose herida

cayéndose sus pétalos rojos

entre cizaña y semilla.

Lo mismo que esa niña

entregándose con pasión

a su criterio formado

en doctrina y oración.

Su precio era muy alto,

desapareciendo sin rastro.

siguio sus ideas claras.

Aquí me encuentro de mañana,

entre la yerba y la tierra

buscando sus frutos secos

para saberla cierta.

Que su vida fue encontrada

en el campo esteril muerta.

Solo recuerdo en sus hojas

perforaciones violentas

que una mano sin valor

disparó el arma secreta.