Ausencias
Lento pero incoercible el tiempo de la ausencia
Uraño y frío se acerca como el invierno crudo,
Ya se que de ti lejos me sentiré desnudo,
Entristecido y lúgubre sin tu tierna presencia.
Se que aunque lejos vaya, muy clara en mi conciencia
Tú estarás fija y honda, iracunda o risueña,
Y es que de mi alma eres ya la absoluta dueña,
Lo mismo que todos mis actos y potencias.
Ignoro si en mi ausencia me sueñas y me extrañas,
Solo se que en mi alma ardes cual pura y clara
Onda de luz que guías mis actos y mis pasos.
Se también que contigo regresare algún día
Para sentirme tuyo y sentirte muy mía
Y solazarme henchido de paz en tu regazo,