Tú…
que operas en el alma,
Curando…
a cuanto desvalido se te acerca,
Eres…
portador de la calma,
Restauras…
a los que llevan una vida terca;
Tu paz…
aplaca las tribulaciones,
Tu amor…
refleja mansedumbre,
Llenas…
de gozo los corazones,
Alivias…
toda incertidumbre;
Tu misericordia…
es infinita,
Tu legado…
es tu Hijo amado,
Tu lealtad…
es una obra bendita,
Tu gracia…
nos libra del pecado;
Tu Espíritu…
nos llena de vida,
Tu prudencia…
es sensatez inequívoca,
Tu fidelidad…
es según tu medida,
Tú disciplinas…
a quien te provoca;
¡Ilimitado Dios!...
¡Rebosante de Bendición!
cada vez que te adoro,
me llenas con tu unción…
¿Quién hará afrenta a tan grande amor?
(victolman)