Amaneció, amanecí.
Esta vez con poca calma.
Sin pensarlo dos veces,
salió un poema del alma.
El sueño no redimió el pasado
Buscándote… aún no estabas
a mi costado.
Te vi, te deseé, te añoré, te respiré
Pero no te luché.
Grito, lloro, lamento, divago y pienso.
medito todo en silencio.
Buscar la razón que le dé a mi esencia
Consuelo para librar las batallas de mis
miedos.
Tener emociones, me refleja lo humana
que soy, mas no me ayuda hoy.
Viví por vivir, soñé por soñar y sufrí sin
luchar.
Han pasado los años y no me libran del
desengaño.
Tuve tanto y no vi nada,
siempre esperando un mañana.
Hoy no hay remedio para el alma
El tiempo me dice que estoy aquí
Las emociones me dicen que sigo aquí
Los sueños me avisan que los dejé ir.