A veces vuelve la melancolía a mis espacios
reclamando el aire de mis suspiros
pensando en cosas vanas e insensatas
que llevan fragancia a viejos libros.
De pronto se me va la alegría,
un motivo y dos y tres me la arrebatan:
La lluvia fría, la luna y el silencio,
Un desdén, una mueca, un descuido.
Es frágil el corazón cuando no hay motivos
la esperanza se siembra en cosas sin sentido,
por ejemplo: el futuro incierto
el futuro es lejano, el ahora esta vacio
luego me animo, me alegro… (me miento)
camino despacio, los días son lentos
aunque rápido el dolor y la lagrima furtiva,
esa lagrima que se lleva por dentro
¡Esa! disfrazada de sonrisa…