Prevaricatos
Nunca gané en los concursos y elogios no merecí
Porque quienes los programan o saben quien va a ganar,
O le adjudican el premio a quien nada en realidad
Dice en lo mucho que escribe y yo a mentir no aprendí.
Mi poesía muerde duro cual fauces de jabalí,
En ella grité sin miedo esta triste y gran verdad:
Son culpables de lo malo que ocurre a la humanidad
Quienes gobiernan al mundo desde el principio hasta el fin.
Unos por ejecutores de horrendas perversidades,
Otros porque en su silencio permitieron que asiera fuera,
Ninguno es menos culpable porque en cuestiones de guerra,
Tan culpable es el que mata y destruye las ciudades,
Como quien fabrica y vende las armas que vidas siegan
Y aquel que en silencio cómplice desde su balcón observa