CONFESIONES DE UNA AMANTE
“Hacer el amor con mi hombre,
Es para mí una experiencia suprema,
Muchos hombres pasaron por mi vida,
A algunos les di el titulo de buenos amantes.
Unos por tener la fuerza y brío de la juventud,
Otros por su loca pasión,
Unos pocos por su inteligencia y manos sabias.
La reunión de esos elementos,
Más el gusto y el deseo por un macho
Que me haga vibrar
Lo encontré en este hombre.
Dicen que cuando el vino entra,
La razón se marcha...
Este hombre es mi vino...
porque cuando el entra en mi cuerpo
Sólo puedo llenarme de placer,
De plenitud, de goce...
Me hace reconocerme como mujer...
Me gusta ser hembra entre sus brazos...
Bendigo mi sexo cuando su sexo reafirma el mío...
Y estalló...
Y grito,
Y gimo...
Y me muero
Y renazco
Se me encienden las pupilas, el alma, los labios...
Me lubrica, me emociona, me moja.
Mis manos se tornan ávidas
De cada parte de su ser...de recorrer su piel,
La boca siente hambre por morder,
Por besar, por chupar
por probar su dermis, su musculo...su carne.
Mis senos se erectan esperando
se amamante en ellos
Y mi vagina como la un animal en celo
Se contrae, se desespera...
El clítoris hace su presencia
Saliendo sin reserva,
Necesitado de sus dedos,
De su lengua, de su verga
A veces cuando nos encontramos,
Ya me lo he comido mirándolo.
Observo su boca, sus manos, su culo,
Le calculo el chimbo.
Me voy deleitando besándolo y besándolo...
Saboreando su lengua, sus labios...
Su boquita rica...no me canso...
Lo haría por siempre...
Mi respiración se va afectando
Porque mi cuerpo va entrando en calor
se vuelve ansioso...de tenerlo y que me tenga...
Sin ropa...sin nada...
en el combate de los cuerpos...
crece el apetito...
Y las manos van buscando entre su pantalón...
Su pene erecto
Mientras se da este preámbulo...
La camita nos espera
El llega siempre primero...
Se quita todo...
Se deshace de impedimentos...
Y en cruz lo veo tirado esperándome...
es irresistible verlo...
Uff...ya soy toda deseo...calentura
le beso todo...los ojos...la nariz...la boca...
Las orejas...el cuello,
vuelvo a la boca...mil veces a la boca...
Es una fuente...húmeda de vida...de pasión...
Me sacio...y sigo más hacia abajo
Su piel es suave...huele a él...
Las papilas gustativas mías se
complacen...en su pecho...en su vientre...
En sus piernas...en su espalda...
en su culo...su huequito prohibido...
Que para mí no lo es...
lo lamo...Lo lambo...sabe rico...delicioso...
Sabe a hombre, sabe a macho,
mis manos necias lo tientan
Y se apoderan de su falo...
Ya parado, templado...tieso...
Como una barra de hierro...
Y quiero que me lo meta...duro...
Que me embista como un toro...
Que me coma todo lo mío
empiezo a pensar en la entrada
Ya estoy lubricada...
Y la vulva...pide a su macho que la llene...
Entonces me rindo y me reacomodo,
Volteo mis nalgas y me pongo en cuatro...
Para que él me coja...
Me lo hunda...
me clave...
Me piche...
Y pido más y más y más...
me enloquece...Porque mi corazón
Va aumentando su ritmo cardiaco
y estoy ebria de disfrute...
Quiero estallar...explotar de gozo
mi cuerpo ondula en movimientos
Propiciando mayor profundidad en la penetración
De la verga de mi macho en mi vagina,
Al metérmelo y sacarlo,
Y llego a veces a orinarme de la emoción...
Como un animalito ante su amo...
Y creo que soy su puta...su perra...
Llego al clímax...
Al momento supremo
la sensación más fuerte que mi cuerpo experimenta...
Creo que a él le pasa lo mismo...
Porque cuando su pene más parece
Una barra de acero al rojo vivo
Que me llega hasta las entrañas,
Gime, ruge, se estremece
Y me inunda con los chorros cálidos de su semen.
Cansados nos abrazamos...
Nos besamos...nos apretamos
Casi en un acto de agradecimiento...”