Vamos, de muchas formas, vamos.
Con tropiezos y dudas
con temores,
con sombras
y con largos cansancios de los hijos que pesan
y que tanto demandan.
Vamos.
Porque existen razones
que nos llenan el alma
y además porque sobra casi toda palabra.
Yo te sigo eligiendo.
Vos a mi.
Y asi vamos.