Serenamente
Pido perdón a todo el que he ofendido
con dichos u omisiones o algún hecho,
al que quiso encontrar bajo mi pecho
tesoros y no halló sino a un dormido.
Tampoco estuve yo, tanto he corrido
por no dejar a nadie insatisfecho
que acaso me perdí y en este pecho
no queda para dar más que un bramido.
Me amaron, ya lo sé, yo he respondido,
también amé hasta verme sin derecho,
(por suerte yo no creo en el olvido).
Sí creo en el perdón, lo pido y fecho
hoy tanto como ayer en que he vivido
buscando lo mejor de cada trecho.
http://fuerteyfeliz.bligoo.cl/
27 08 12