Presiento que en el lugar en el cual
estás la estás pasando
mejor que aquí, ojala no me fallen
mis presentimientos, porque
tú eras una muy buena persona
que lo daba todo por nosotros.
Solamente tú sabías que
cosas hacer y decir para
hacernos felices,
pero desafortunadamente hoy
estamos tristes con tu partida
y lo peor de todo es que te fuiste
sin decir adiós,
pero nosotros estamos
tranquilos, porque sabemos
que donde estás.
Tú tienes un lugar muy especial para
vigilarnos y cuidarnos. Te busco
en los lugares que frecuentabas,
pero es en vano, porque ya no podré
salir contigo agarrados de la
mano como lo hacíamos antes de tu partir
a un mundo lleno de alegrías y
sonrisas, donde todas
las cosas nunca
van aprisa.