Flotando bajo la más serena soledad de la luna plateda, me quedé atrapado en grano de arena del reloc. Hundiendome en el espeso silencio de un recuerdo olvidado, mesente a llorar por mis lagrimas caidas, observe nuevamente el cielo con hambre de nadar por el espacio, pero seguía encadenado a la tierra sin saber porqué;bajé la mirada, todo estaba, todo estaba oscuro, entonces quize ser sombra pero tampoco me era licito pues ya se me habia eregido un templo; despues deseé convertirme en olvido y me dí cuenta que el olvido no desaparece las cosas, solo las guarda para el momento indicado. Pasé horas caminando perdido y desorientado por los de mi memoria, navegando por inmensas lagunas mentales hasta que un susurro me insinuo que todavía seguía en mi habitacion desvelado, mirando las sombras en el techo.