En mi mente solo queda
la nostalgia de un adiós sin despedida
la ausencia de las palabras
que no se pronunciaron nunca,
la tristeza de haber quedado sola
y el recuerdo olvidado de los días
cuando estabamos juntos
y pensé que a mi vida,
jamás le faltaría
el sonido melodioso de tu voz
la luz de tu tierna mirada
el calor de tus abrazos
y el néctar dulce de tus labios,
cuándo al saber de tí
yo, me sentía extasiada
y era muy feliz
al imaginar que siempre
a mi lado estarías,
y ahora solamente tu recuerdo
quedó impregnado en mí
y aunque yo anhele verte
y volver a sonreir
ya no será posible
porque tú no estás aquí.