Causal de mis desgracias, molino de mis ansias
pérfido sentimiento que me atrapas y subyugas.
Va rodando por tus pendientes mi equilibrio.
Va muriendo la calma, despedazando la razón.
Siempre me engañas con tu falsa luz
y al darme cuenta estoy en las tinieblas
que me das después de un desencanto.
¿Existes?
Siempre creo que sí, porque te siento
y cada vez me apasionas y me vuelves
como una adolescente ilusionada.
Pero luego con un sonar de dedos despierto
y me encuentro en un árido desierto,
con la resequedad clavada en mi alma
cual espina sangrándome la vida.
Estoy perdida lo sé, y luego no me encuentro
porque estoy vencida por ti, mal sentimiento.