Que vengan todos los poetes del mundo a mi amado suelo
a embriagarme con sus poesías y a endulzar mi alma libre,
que vengan todos a cortejar a esta poetiza llamada libertad.
Que vengan todos los poetas del mundo y que con sus versos
Vayan formando escaleras entre el cielo y la tierra,
Versos como si fueran aguas de los rio y mares que bañan las costas de mi suelo.
Que vengan todos los poetas del mundo y si les preguntan ¿Quién les dijo que podían venir?,
que simplemente respondan ¡venimos a cortejar a una poetiza llamada libertad!,
y que nos deja expresar todo lo que sentimos del latido de las palabras por llamarse libertad.
Dejen que vengan todos los poetas del mundo enamorados de esa poetisa llamada libertad,
la misma que los vio nacer y crecer con ese Don tan especial, diría casi celestial (escribir),
corazón cargado de amor a las letras a punto de estallar como bomba en una guerra mundial.
Dejen que todos los poetas del mundo vengan a mí, a esta poetiza llamada libertad,
les dejo que hagan de mi nombre Libertad el libro viviente de cada palabra emergente,
que surja de todo ese Don con el que yo misma los vi nacer y fortalecer con el tiempo.