mario mena mena

Amor y boleros (4/11)

Si de amor de parejas se trata el bolero es su medio de prensa

en ellos se informa en toda variedad de tonos, de sueños,

las esperas, las traiciones, el deseo de ser amado

aunque sea de mentiras "con un beso que parezca de amor"

se prefiere morir antes de ver ajena la mujer amada

y se dice a ellas palabras tan bellas como merecidas

que "una rosa en tu pelo parece una estrella en el cielo"

y antes que no tener nada de ella se le pide al menos el odio

"porque el rencor hiere menos que el olvido"

y eso ya es algo de consuelo porque se tiene el supuesto

"que tan sólo se odia lo querido"

"Juramentos" para después de muertos amarse más.

Declamaciones cantadas dejan constancia

de la inmensa inseguridad del ser amado,

del temor a no ser correspondido,

la seguridad casi completa que se sufre una traición.

Cantan los amores dolidos,

y fuera de sí amenazan cantando

que están dispuestos a quitar la vida al ser que dicen "querido".

y despechados corazones alzan alto sus voces

de romances quebrados, imposibles comprensiones

y "pensar que llegar a quererte es creer que la muerte se pudiera evitar"

También cuando el amor filosofa su experiencia

en el bolero sentencia que "amar es sufrir, querer es gozar."

y un lamento queda en el canto del amor de pareja

"casi todos sabemos querer, pero pocos sabemos amar"

Pero esta verdad que se reconoce cantando

en este contrapunto del amor deseado y el amor vivido,

es la verdad de la carencia que todos padecemos:

que el amor en todas sus acciones, se vive como dolencia

ramillete de ilusiones, una oración de impotencia

aceptando que perdimos las alas para alzar su vuelo.

¿Es que entonces que estamos perdidos,

y del amor sólo podremos vivir su anhelo?

La esperanza abre sus alas blancas cuando dice el Libro Bendito

"si no tengo amor nada soy", el "nunca deja de ser"

y a la par de la fe y la esperanza "el amor es el más importante"

Queda entonces por delante responder qué es el amor

y cómo se práctica su arte.