Entre las brumas de un soleado día,
En el resplandor de la media noche,
En la brillante estela de tu piel asombrosa,
En los gestos llenos de notas sublimes
Componiendo una melodía de amor,
En las huellas estelares de tu figura
Verbal y llena de vida,
En tu rostro de perfección universal,
En la grandeza sublime de tu alma,
En la pasión enceguecedora de tus deseos,
En la delicadeza llena de ternura de tu voz,
En la tempestad de tus ojos fuego,
En tu briosa cabellera obscura noche,
En los placeres infinitos de tu ardiente cuerpo,
En el oleaje salvaje de tu danzar,
En el aroma excitante de tus olores instintivos,
En las lágrimas miel de tus dolores,
En tus pechos llenos de poesía flagrante,
En tus manos inquietas dibujando frenesí,
-me pierdo entre sueños infinitos-
Para despertar en el lecho,
de tu eterna compañía….