INSTRUCCIONES PARA CONQUISTARTE
Primero:
Elegir mil palabras en el tiempo,
desarmarlas, teñirlas de luz,
mezclarlas con voces limpias,
tenderlas al sol y a la noche,
buscar aquellas parecidas a tus ojos
y juntarlas;
juntarlas
con aquellas debeladoras
de tu sonrisa única.
Segundo:
Serenar mi pecho,
mirarte de reojo para entreverar tu pelo
con aquellos rebuscados sonidos,
de los cuales quedará solo uno
prendido
de la seda de tu cuello.
Tercero:
Y en el justoexactopreciso instante,
cuando esté seguro
de que esas pocaspulidastímidascalladas palabras,
sobrevivientes,
náufragas,
puedan conmover el mar de tus ojos
y agitar tu pecho al mirarme;
lanzaré a navegar mis sueños en tus oídos
para conquistar tu alado corazón peregrino
como un viejo y prudente cazador,
que espera paciente
atraparte sola,
desguarnecida,
indemne y vencida,
sola,
solamente con tus labios por escudo…
Esperando
Esperando
Esperando…