Baila, tu cuerpo, baila
uno, dos, tres, sin parar
te mirabas frente al espejo
y no parabas de danzar
Jugabas siendo niña
gracia, ilusión infantil
moviéndote como un cisne
al compás de la música
y un balancé
Tu cabellera, en rodete
convertida fue, malla, tutú
cintas rosas se deslizaban y
esperabas la melodía que
tu liviana figura movía
Se encendían las luces
tus suaves pies, en punta
se agitaban al danzar
alma, corazón y magia
único sueño bailar
Y así, sigues hoy el ritmo
con emoción y entrega
cada uno de tus días
como bailarina que danza
en el escenario de la vida!!