No entendeis?, la amaba, en el deseo inútil de necesitarle,
De sentir sus brazos como enredaderas, ceñir mi cuello;
Con ese anhelo de sentir sus risas y sus jadeos,
Con esa ansia de amarla a ella o o morir en una isla abandonada.
No entendeis? La amaba, tal vez haya una habitación sola y extraña,
Esperándola, tal vez mañana, o pasado mañana,
No importa, baste saber que ahí estará para acunarla
Como el tranvía nuestros paseos inseguros.
No entendeis? La amaba, con sus besos adornando el verano,
Con sus cabellos matizando el estío,
Con sus ojos decorando mis bosques y mis mares,
Con sus pies adorados por mis manos.
No entendeis? La amaba, con el sueño de un día
amanecer dormidos con las cabezas juntas,
Con el sueño de olvidarme de todo,
Con el sueño de tener para siempre su mano en mi mano
Jordi