Mi alma cansada del zapateo incesante que los des amores y desprecios han bailado sobre ella, reclama calma, y de las cenizas resurge gritando BASTA!
Lecciones que en el pasado, de sangre, dolor y lágrimas marcaron mi sendero. Hoy son rosas hermosas, con pétalos escarlatas que se abren al nuevo día con esperanza; espinas que son parte del tallo que las sostiene y marca el camino que asciende solo para encontrar belleza teñida del rojo que alguna vez ensombreció mi alma.
Y así, con olor a rosas en este jardín de la vida, recibo el sol, la lluvia, y la noche, mas fuerte, mas viva! Por que yo decido mi camino y sus aromas. Y la calma y respuestas que tanto buscaba las ocultaban mis lágrimas victimas. Sonrisas de esperanza desbordan ante la alegría de este rescate. Yo puedo, yo debo, yo merezco, yo me amo!