Pensando en ti
es como se fugan los demonios
del altar de la tristeza
que me abordan iracundos
incrédulos y burlones
pero no hay corazones
como los corazones nuestros
que para nada se los presto
al pasado o al futuro
y aunque el invierno sea duro
también es duro el verano
ambos son ambientes hermanos
si por no recordar me muero
y en la tristeza me doblego
de rodillas y con llantos
pero soy todo amor
soy todo canto
y aquí me ves entre lineas
con tu rostro de espejo
con tu piel de perfume
tus manos, piel de lumbre
tus ojos un arco al deseo
que me desvían del camino
que ya dejó de ser mío
por no decir que es de tantos
que soy feliz por tenerte
niño de nuevo por besarte
y de remedio tengo tu estambre
con el que tejes mi alegría
que el que me vea también sonría
porque sonrío de pensarte.
Blas Roa