Cuando se oscurece la luna,
y no canta ninguna de esas ranas
que acostumbran hacerlo en su cunas,
es justamente cuando pasan los carros,
los tarros de aceituna.
No tengo lluvia, ni fotos de rubias
no tengo dinero ni diamantes,
pero mi boca estudia cada ranura
de un aguacero sin claves.
No tienes bandera ni estandartes.
Me baila una foca en los ojos.
Me habla una roca con anteojos.
Aquí cajones, flores mosquitos y abrojos,
Y ya tengo la mona lisa en mi bolsa.
Es un extraño mundo
pero de eso no vengo a hablarte.
Sino de que eres mi amor y no lo sabes,
Que de mis sentimientos tienes las llaves.
Tienes una orca bañada en mis lagrimas,
y mi nombre impreso en tus lápidas
y miradas flojas que se quitan rápidas.
Aunque no me quieras como yo te quiero,
en mi lámpara hare caer gotas de suero,
que dejare perder por si muero.
tengo un piguino sentado llorando,
el frio lo ataca y se vive quejando,
hay algo en su pecho que lo esta molestando.
Te amo, y no lo sabes
mi mundo te parece extraño
solo porque no soy como los
de la masa.