No seré tu aviador
ni voy a ser tu carreta
no seré el eslabón
entre el mono y la humilde ciencia
no seré tu historiador
ni tu navegante a vela
pero seré tu amor
con mis pupilas despiertas.
No seré tu esclavo
ni el rey Midas en oferta
ni voy a ser tu marido
ni la flor en la ventana abierta
no seré tu profesor
ni tu mi alumna discreta
más bién seré tu canción
hilvanada por una orquesta.
Si algo quisiera ser
siempre tendrá que ver
con el que tu me quisieras.
Incluso podría ser aquello que tanto anhelas.
Con que me veas venir
mi alma estará satisfecha.