La mirada fugitiva de tus ojos
Que en mis tristes pupilas se reflejaron,
El canto alejado de aquella ave
Que solía nuestro despertador ser,
Ya no se escucha como
Aquella primera vez
Los besos otorgados con aquella pasión
Ahora son escarcha en tu corazón
La primera carta de amor
Se ah convertido en cenizas
De triste desilusión
Tus brazos que me acurrucaban con tanta calidez
Ahora se llevan mi calma
Dejándome en un triste desesperación
Del no encontrarlos al anochecer
La tarde llega despacio y no veo el fin de este caminar
Tristemente mi cabeza se agacha
Cuando recuerdo aquel mirar
Aquella media vuelta para nunca regresar…