No se paren frente a mí...
No interfieran en mi camino.
Porque ya no soy el de antes
y la piedad la desconozco.
Porque mi alma no es la misma
y a los recuerdos los ignoro.
¡Mi silencio los lastimará!
Y el aviso ya está hecho.
Ahora bien...
O se alejan o se pierden.
O se unen o se mueren.
MARTÍN RUIZ DÍAZ DÍAZ
18/febrero/2010