*Caballo*
Sois los presuntuosos amos Gaucho y ranchero
cuando en carrera quieres que cuide tu ganado,
sin dar respiros a mi infligido orgullo de caballo
olvidas que sin mi trotar tu tierra fuese paramo.
*Rancho*
Tu esplendida raza de corcel negro me asombra
cuando esa otrora tradición maravilla tu pedigrí,
sudores de negruras galopantes adornan tu piel
cuando el arrogante gollete relinchaba al viento.
*Gaucho*
Ser adicto al caballo es ser Gaucho de mí Pampa
con las bolas colgando cerca de la cheira afilada,
encarnando el ser de mi linda Argentina querida
tratando como mí amigo al apuesto corcel negro.
*Caballo*
Soy la casta para rancheros y Gauchos valientes
parvos alfeñiques humanos montaran tu cuadra,
de mi negro lomo que se encara contra el viento
aplacando el espumoso belfo en mí linda Pampa.
*Rancho*
Cuanto galopar asombrando al céfiro de la tarde
agrupas con girar y relincho las reses desviadas,
hasta que la calma retorne suavemente al ocaso
guiñando a la estrella relampagueando mi alma.
*Gaucho*
Inmortal Gaucho que opta ofrecerse en la Pampa
junto a su bello caballo negro que trota al viento,
irradiando la fraternidad que simboliza la llanura
cuando los cascos elevaban mí tamo del ensueño.
*Galope*
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
22 septiembre de 2012