Treinta y ocho años que te fuiste,
madre. Que no estás con nosotros.
Te cuento que hace un momento,
había escrito un monólogo,
y lamentablemente no pude publicarlo
por problema de la página.
Estoy reemplazando, con este,
lo que antes había escrito,
y la inspiración se me cortó,
haciéndote a tí este pequeño
homenaje recordatorio.
Tenía pensado hacerlo,
pero lo había descartado.
No sé por qué.
Pero ahora, lo hago,
dedicándote estas palabras.
Te cuento, madre,
de que estoy bien,
con mis alegrías y mis tristezas
a cuestas. Mis tristezas por ausencias.
Mi tristeza porque nuestro país
no marcha bien.
Mi angustia por amar
y no ser correspondido.
Y mi alegría de estar con
la mujer elegida,
con la cual compartimos
momentos felices.
Cómo te recuerdo madre...
Mañana iremos a la iglesia,
en la cual oficiaremos una misa,
y yo he de hacer la Palabra de Dios.
Hacer... quise decirte leer.
Oraremos por tu descanso
en la iglesia de San Francisco de Asís.
Treinta y ocho años sin ti, madre.
A veces, tus hijos, los tres que quedamos
de los cinco que éramos,
cuánto necesitaríamos estés
con nosotros.
Las madres cuando pierden
a sus hijos
los recuerdan
durante el resto de sus días;
nosotros los hijos,
recordamos toda nuestra vida
a nuestros padres, que
ya no están este mundo.
Aparte de mis penas,
que nunca faltan
en todo Ser,
tengo mis alegrías, madre.
Ha llegado la computación mamá.
Y ella es un puente para
que la gente podamos comunicarnos.
A través de ésta, he conocido a mucha
gente. Todos son gente, amigos,
que escriben. Son escritores.
Trabajadores, maestros.
Algunos jubilados, como yo.
Son poetas, madre.
Hombres y mujeres
que transmiten sus pensamientos
a través de poemas.
Poemas del alma.
Me adherí a esta página
y algo escribo en ella.
Me leen los poetas,
mujeres y hombres,
y nos comentamos
los temas que escribimos.
¿Recuerdas madre cuando junto
a papá, me escuchaban y aplaudían
cuando yo recitaba poemas?
Ahora, alguno de ellos escribo.
A mis amigos les gusta,
según me dicen.
Y ponete contenta mamá,
soy muy feliz de estar con ellos.
Algunos me quieren,
y yo les digo que l@s amo a todos,
porque l@s amo de verdad.
Porque me siento unidos a ellos.
Diría que somos colegas. Poetas.
Poetas con alma sensible.
Con sentimientos profundos.
Transmitiendo lo que
interiormente sentimos.
Alegrías. Penas. Amor.
Compasión. Amistad...
Todos nuestros sentimientos
compartidos. Con amor.
Lo siento así, madre.
Amor.Como el que vós nos
brindabas, madre.
En vida, te amamos.
Y haciendo ya tanto tiempo
que no estás, te seguimos
amando .Permanentemente
tenemos este sentimiento
hacia vos, madre.
Sigue descansando en paz.
Esta noche, mi paz es estar
contigo. Como todos los días
de mi vida. Aunque ella, a veces,
sea cruel. Las personas a veces,
tenemos crueles corazones.
Pero siempre tratamos
de ser buenos, y hacer a un lado
la crueldad. Amar. Amar a nuestro prójimo.
Como Dios nos enseñó.
Y lo logramos madre.
Con buenas intenciones de amar,
logramos amarnos unos a otros.
Siempre tendría que existir
este amor, para que el mundo,
esté en paz y sea mejor.
Hasta siempre madre.
Tus hijos vivos,
te seguiremos amando eternamente.
Todos los derechos reservados del ( Hugo Emilio Ocanto- 22/09/2012)