Tal vez en tus noches de soledad, mi nombre quede en tu corazón, en tu mente, en tu alma, sin poder sacarlo sin ninguna razón.
Talvez en aquellas amanecidas, sin poder dormir, quedes recordando los bellos momentos vividos a mi lado sin poder entender la razón de esta partida.
Tal vez en esas tardes con tormentos, la lluvia venga a ti con dolores y sufrimientos y sin poder evitar sentir, porque te enamoraste de mi.