Dice mi Tía
que no debo jugar
con fósforos o velas.
Que el fuego
y los niños,
siempre tráen problemas.
Pero, mis primos,
tienen en posesión,
hermosos encendedores,
ésos, a bencina,
que desvélan mi sueño
en mundos de inventores.
Cómo esconderé
mi colección de tesoros
del paternal estrago.
No les van a gustar
los cohetes que guardé
desde varios "fin de año".
Temo que no entiendan
los difíciles cálculos
que llevo emprendidos,
para poner en órbita,
la lata de galletas
desde el terreno baldío.