Hugo Emilio Ocanto

Poema: Cuando vuelvas, no te vayas más (Grabado)

Con paciencia, debo encontrarte.

Con corazón lastimado,

debo recapacitar.

Con el alma abierta

a mis sentimientos.

Te busco, y no te puedo hallar.

Corazón lastimado

porque sabe que es

culpable de tu ausencia.

Que nunca supe amarte,

me dijiste.

Pero tú sabías que mentías.

Pruebas te he dado

de mi amor.

Pero tú no tenías noción del tiempo.

Ese tiempo que ambos nos dedicamos,

y ahora, quedó atrás.

Mis dolencias para ti,

nunca fueron importantes.

Sabes que mi corazón está fallando.

Sabes de mi problema,

pero lo ignoras.

No te creo. No eres indiferente.

Simulas serlo.

No sé por qué.

Pienso que es para darme celos.

¿Tener celos yo porque

tú te alejas cuando quieres?

Tu comportamiento me altera, sí.

Pero no me mata.

Solo me destruye anímicamente.

Eres una mujer muy

especial.

Pero no acepto me engañes.

Creo en tu fidelidad.

Nunca he dudado de ti.

Si te has ido de mi lado,

hazte cargo.

Quisiera ser a veces como haces tú,

mostrar indiferencia,

pero no la siento.

Tampoco tú. La simulas.

En conclusión, si me amas...

por qué me dejas.

¿Es que mentalmente no andas bien?

¿ O es que a mí quieres atormentarme?

Todo esto que nos pasa

es tan confuso.

Te vas, y de pronto,

nuevamente apareces en mi vida,

como si nada hubiese sucedido.

¿Qué prueba me estás tomando?

Soy sí, culpable de tu ausencia.

Porque tenemos discusiones propias

de dos seres que se aman.

Lo que no comprendo es

por qué te vas,

por qué me dejas.

Te fuiste. Te busco,

y no te puedo encontrar.

¿Dónde te has ido

mi amor?

Dejo de lado todas mis locuras.

Todas mis exigencias.

Mi personalidad es así.

Y tú tienes la tuya.

Somos dos personas con

caracteres fuertes.

Pero nos amábamos.

Y no quieras nuevamente

hacerme creer que tú

no me amas. No me mientas.

No me ocultes la verdad

de tu corazón.

¿Insistes en darme celos?

Pues bien, sí, soy celoso.

Celoso hasta del viento

que roza tu piel.

Celoso de tus amistades,

de tus libros,

de tu arte de escribir.

Yo nada sé de eso.

Pero mi único talento

es el de amarte.

No quiero perderte.

Dame una señal

de dónde ahora estás.

Nadie lo sabe. Nadie lo confiesa.

¿Te has confabulado

con todos para que me oculten

dónde estás?

Cansado estoy de vagar.

De buscarte. Culpable,

sí soy culpable

de tu ausencia.

¿Quieres que te pída perdón?

No, por ahora no es necesario.

Si tú eres orgullosa,

también yo tengo mi orgullo.

Qué tontos somos.

Dejemos nuestro orgullo

a un lado. Y vuelve a mí.

Te prometo cambiar.

Pero tú también debes prometerme

un cambio.Así nos hemos de entender

mejor. Vuelve.Sin rencores.

Eres...una mujer muy especial.

Y yo, un hombre que te necesita,

porque realmente te amo.

Y tú a mí. Demuéstramelo.

Déjame volver a ver

tu sonrisa.

Te prometo un cambio.

Cambiemos los dos.

Y volvamos a amarnos.

Seguiré en la espera de tu retorno.

Cuando vuelvas, no te vayas más.

Te espero, amor. Estoy resignado.

Es tan grande mi amor...

que me aferro a la esperanza

de que vuelvas a amarme

como yo te amo.

Todos los derechos reservados del autor ( Hugo Emilio Ocanto- 25/09/2012)