EL PARTO LITERARIO DE KAFKA
Ahí
en los subsuelos
dónde se vio horriblemente veraz
desnudo de sus ropas
del quehacer fraudulento
el flaco hipocondríaco
sublimó la bilis
sofocándose con las ausencias
en forma de viento
y rumiantes sílabas
Laberíntica escalera
dormía en los deshechos
de una eternidad violada
tras sus espaldas cargadas
de un filtrado fósil llorón
Un pétalo ajado
vetusto de hermosura remota
colgaba de un hilo de su dedo
como el respeto del tiempo
con una pétrea obstinación
Su voto solitario
una pequeñez poderosa
ignorada
de escarabajo
pendiente de un temor
que franqueaba hacia firmezas
libres de culpa
remitentes con la ilusión desdichada
que acalla la ebriedad
repantigada en un soslayo
pretenciosamente legal
Escandalosas zumbaban por el habitáculo
las briznas de hierba
desafiando su temblorosa verticalidad
que amarraron las gargantas condenadas
a los espectrales abalorios insomnes
Ahí
en los subsuelos
dónde se vio horriblemente veraz
quedó sentenciado
a chistarnos descarado
sobre nuestro frío estival
(Kabalcanty. 1994)